Primer ministro húngaro Orban visita a Merkel con aire de victoria
Primera modificación: Última modificación:
Berlín (AFP) –
Viktor Orban se reúne este jueves con la canciller alemana Angela Merkel en Berlín, en visita que tiene un aire de victoria para el primer ministro húngaro, cuya férrea posición sobre la inmigración gana terreno en Europa.
"El viento cambió de dirección en Europa", se congratuló recientemente el diario húngaro Magyar Idok, afín al poder en Budapest, al considerar que la canciller alemana se vio obligada a una "marcha atrás" en su política de asilo.
Merkel y el jefe de gobierno húngaro se han enfrentado durante mucho tiempo a nivel europeo sobre este asunto, y reflejaron polos opuestos en materia de política de asilo en Europa: de un lado, voluntad de acoger a los solicitantes de asilo que huían de la guerra en Siria en 2015; del otro, rechazo intransigente a la inmigración, en nombre de la defensa de los valores cristianos del continente.
Para Orban, se trata de la primera invitación a Berlín en casi tres años, es decir desde la controvertida decisión de la canciller de abrir las puertas de su país a centenares de miles de solicitantes de asilo en 2015.
- 'Imperialismo moral' -
Los tiempos han cambiado. Hace poco, Orban denunciaba el "imperialismo moral" de la canciller alemana, mientras Merkel criticaba en 2016 el cierre por Budapest de la "ruta de los Balcanes", entonces transitada por migrantes para llegar desde Grecia a los países de Europa occidental.
El mes pasado, Merkel tuvo que rendir homenaje -con la boca pequeña- al primer ministro húngaro que "de alguna manera, hizo el trabajo por nosotros", con sus muy estrictos controles en la frontera con Serbia.
Poco a poco, Orban ha logrado imponer su agenda al resto de la UE sobre temas migratorios, ayudado por la llegada al poder de la extrema derecha en varios países, como Austria o Italia, y su emergencia en otros, como la propia Alemania.
La cumbre europea dedicada la semana pasada a las migraciones supuso una consagración para Viktor Orban, que habló de un "inmenso éxito" para sus tesis.
Europa quiere ahora reforzar los controles en sus fronteras y dotarse de instrumentos para mantener a distancia a los migrantes, con sus "plataformas de desembarco" en África del norte.
Al mismo tiempo, Merkel tuvo que enterrar definitivamente su proyecto de cuotas de repartición de solicitantes de asilo en la Unión Europea, debido a la oposición de los países del centro y este europeos.
La posición húngara sobre la inmigración se ha convertido desde esa cumbre en la "de la UE", proclamó Orban esta semana en el diario alemán Bild.
"Es él el que dicta sus condiciones" a la canciller, analizaba el semanario alemán Der Spiegel, que habla de "orbanización" de la política migratoria de Merkel.
La "canciller de los refugiados" se ha convertido en "la de la fortaleza" Europa, asegura por su lado el diario Süddeutsche Zeitung.
- Presión -
La visita de Orban a Berlín se produce cuando Merkel ha tenido que renunciar a su generosa política de acogida iniciada en 2015, bajo la presión del ala derecha de su coalición gubernamental.
Merkel tuvo que ceder ante su ministro del Interior, Horst Seehofer, presidente del muy conservador partido bávaro CSU, que amenazaba con abandonar la coalición de gobierno.
Seehofer, líder de esta rebelión, cultiva desde hace años su cercanía con Orban, con el que ha sido visto varias veces en Baviera. Orban califica por su parte su relación con el partido del ministro alemán de "extraordinaria confraternidad de armas".
Este jueves, Seehofer afirmó además haber tenido la víspera una conversación telefónica con Orban, anticipándose a la propia canciller Merkel.
© 2018 AFP