El presidente catalán pide aislar a los violentos de las protestas y amenaza con un nuevo referendo

Tras una nueva noche de disturbios, la tercera, en varias ciudades catalanas, Quim Torra compareció ante el Parlamento regional donde avisó: “Habrá que volver a poner las urnas”. En su discurso, hizo un llamamiento a la calma y anunció una investigación sobre “quiénes están detrás de los incidentes”.

Disturbios en Barcelona, 16 de octubre de 2019. REUTERS/Rafael Marchante

La movilización contra la sentencia del ‘procés’ no amaina. Cataluña se levantó este jueves por la mañana con cortes de carreteras y vías de tren tras una nueva noche de disturbios en las diferentes provincias de la región con enfrentamientos entre manifestantes y policía nacional y regional (Mossos d’Esquadra), quienes denuncian que recibieron cócteles Molotov y “objetos con ácido”.   

El presidente Torra, muy criticado por su gestión de la crisis, llamó a la calma este miércoles pasado por la noche y este jueves ante los parlamentarios catalanes. “Nosotros, los independentistas, no nos reconocemos en la violencia. La rechazamos, como siempre lo hemos hecho. Condenamos todo tipo de violencia, venga de donde venga y pretendan justificar lo que sea. Si hay agitadores y provocadores que quieren cambiar el rumbo de las manifestaciones pacíficas, se tendrán que aislar y apartar”, dijo sin entrar en más detalles sobre el número de detenidos y heridos. Esta noche, según datos oficiales, 96 personas tuvieron que ser atendidas por los servicios médicos y 33, fueron arrestadas.

“Es incomprensible, de un lado (el presidente Torra) alienta a los activistas a una mayor radicalización, el famoso apreteu (apretad en catalán) y por otro, no tiene más remedio que enviar a las fuerzas del orden público para restablecer la normalidad. Es todo un sinsentido. Utiliza una retórica incendiaria”, analiza para RFI, Cesáreo Rodríguez, catedrático de Ciencias Políticas de la Universidad de Barcelona.

Torra centró su discurso en la sentencia del ‘procés’ del lunes pasado, en la que se condenó a entre 9 y 13 años de prisión a los líderes independentistas. "Habrá que volver a poner las urnas para la autodeterminación, ningún tribunal impedirá a este presidente cualquier iniciativa por el derecho a la autodeterminación”, amenazó Quim Torra.