La Policía francesa se suma al descontento de los ‘chalecos amarillos’
En medio de la crisis de la crisis de los “chalecos amarillos”, sindicatos que representan a las fuerzas del orden anuncian excepcionales medidas de protesta –incluyendo el cierre de comisarías este miércoles- si el gobierno no responde a sus reclamos de millones de horas extras impagas, detener los recortes de presupuesto y la expresión del reconocimiento a policías agotados.
Primera modificación:
Los “chalecos amarillos” podrían ver engrosar sus filas con “chalecos azules”. Los policías franceses denuncian que el presidente francés los ha olvidado en las medidas que ha anunciado para calmar el descontento social, sobre todo en un contexto de recortes presupuestarios para las fuerzas del orden y el cansancio entre los uniformados, que se dicen extenuados por las violentas manifestaciones del último mes y la amenaza terrorista.
El sindicato Unsa Police pidió ser recibido por el presidente Emmanuel Macron al tiempo que lanza una operación de “servicio mínimo” en sus actuaciones a partir de este lunes, así como un día “comisarías cerradas” para este miércoles, en el que sólo responderían a llamados de emergencia.
“Las rotondas no están reservadas únicamente a los ‘chalecos amarillos’”, advierte en un comunicado el sindicato, que alude a los sitios donde se concentran los manifestantes.
“El presupuesto sufre un recorte de 62 millones de euros en la inversión en la policía nacional, lo que generará una vez más una degradación de nuestras condiciones de trabajo”, agrega.
Por su parte, el sindicato Alliance denuncia un año sin aumentos de sueldo y pide a los diputados que no voten el presupuesto. “Si el presidente de la República no anuncia rápidamente un plan ‘Marshall’ para la policía nacional, otras medidas serán llevadas a cabo”, alerta.
Entretanto, la asociación “Mobilización de policías disgustados”, que dice ser independiente de los sindicatos, hizo un llamamiento este jueves a una manifestación delante de la comisaría del octavo distrito de París, cerca de los Campos Elíseos, teatro de las manifestaciones de los chalecos amarillos.
El secretario del sindicato Unité SGP Police-FO también anuncia medidas de protesta y pide el pago de millones de horas suplementarias pendientes.
El ministro del Interior Cristophe Castaner, que debe recibir este martes a los principales sindicatos de policías, se dijo abierto a una remuneración puntual de las fuerzas del orden que han hecho un trabajo “excepcional”.
Además indicó que abriría una discusión sobre el pago de las horas extras, cuya deuda por parte del Estado ascendería a 275 millones de euros “desde hace decenas de años”.
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